Tenía ya la vía puesta y vio que no podía hacerlo
25-MARZO
Era un día más de campaña frente al abortorio Dator. De repente, una mujer salió del centro algo confundida. Junto a su pareja, se metieron a la cafetería de enfrente a desayunar. Pasaron por delante del Refugio Provida y se quedaron mirándolo.
Ana, del Refugio, los invitó a entrar y les ofreció ayuda. Cuando le preguntó qué fue lo que la motivó a cambiar de opinión, dijo que ya estaba tumbada, la enfermera le acababa de poner la vía. Simplemente se dio cuenta de que no podía hacerlo. La enfermera le preguntó qué había sentido cuando le habían quitado la vía. Ella respondió: “alivio”. Entonces la enfermera le dijo que se fuera.
En el Refugio además le dijo a Ana que tenía una amiga que también estaba pensando abortar. Rezamos por ella.
Se fueron muy contentos y agradecidos por la decisión de tener a su hijo. En realidad no tenían un motivo fuerte para abortar.
En palabras de Ana: “Nosotros lo vimos como un milagro, que simplemente se levantara y saliera de allí sin nosotros haber hecho nada. Desde luego el poder de la oración ha tenido que ver. En el Refugio notamos muchísimo el poder de la oración cuando estáis allí”.
Agradecemos al Refugio Provida por acompañar a esta madre y por compartirnos el testimonio. Además rezamos por la amiga para que también elija la vida.
Ana, del Refugio, los invitó a entrar y les ofreció ayuda. Cuando le preguntó qué fue lo que la motivó a cambiar de opinión, dijo que ya estaba tumbada, la enfermera le acababa de poner la vía. Simplemente se dio cuenta de que no podía hacerlo. La enfermera le preguntó qué había sentido cuando le habían quitado la vía. Ella respondió: “alivio”. Entonces la enfermera le dijo que se fuera.
En el Refugio además le dijo a Ana que tenía una amiga que también estaba pensando abortar. Rezamos por ella.
Se fueron muy contentos y agradecidos por la decisión de tener a su hijo. En realidad no tenían un motivo fuerte para abortar.
En palabras de Ana: “Nosotros lo vimos como un milagro, que simplemente se levantara y saliera de allí sin nosotros haber hecho nada. Desde luego el poder de la oración ha tenido que ver. En el Refugio notamos muchísimo el poder de la oración cuando estáis allí”.
Agradecemos al Refugio Provida por acompañar a esta madre y por compartirnos el testimonio. Además rezamos por la amiga para que también elija la vida.